Mossos d’Esquadra

Agentes de Mossos de la Comisaría General de Información de Girona detuvieron el 2 de septiembre en Vilafranca del Penedès un hombre, de 35 años, de nacionalidad española y vecino de Sant Quintí de Mediona (Alt Penedès), como presunto autor de un delito de odio en el ámbito LGTBI y un delito de amenazas que habría verbalizado el pasado 7 de julio en el parque acuático Water World de la población de Lloret de Mar.

Estos hechos tuvieron lugar a lo largo del día en el interior del recinto acuático cuando el detenido, acompañado de tres hombres más, profirió insultos y amenazas sin motivo aparente a un chico de 29 años que estaba de excursión con una asociación que promueve la diversidad.

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El primero de los hechos sucedió en la zona de los aseos cuando cuatro hombres comenzaron a reírse del chico y uno de ellos le insultó con expresiones de intolerancia y desprecio. Unas horas más tarde, en la zona de los toboganes, este mismo hombre fue más contundente: le amenazó de muerte y le proliferó insultos relacionados con su orientación sexual, además de abalanzaron a él con intención de agredir -el, lo que evitaron las personas presentes en el lugar.

Finalmente, la víctima y la educadora se pudieron deshacerse de su agresor, informaron de los hechos a los trabajadores del parque y decidieron marcharse.

La denuncia de la víctima, las declaraciones de los testigos que presenciaron los hechos y la recogida de imágenes ha sido fundamental para la investigación, que ha culminado con la detención de esta persona.

Los delitos de odio y discriminación son una expresión de intolerancia y de desprecio hacia la diferencia, comprendiendo casuísticas que pueden tener que ver con el racismo, la xenofobia, la LGTBIQ + fobia, la intolerancia religiosa, la intolerancia hacia la diferencia política, la misoginia y el machismo, el desprecio por las personas discapacitadas o la aporafobia (menosprecio hacia los mendigos).

Con el objetivo de buscar la máxima eficacia en la resolución de casos, es de especial trascendencia que las víctimas de este tipo de delitos denuncien a dependencias policiales. Este es el primer paso para comenzar a recopilar toda la información relacionada con los hechos, recoger el máximo de pruebas e indicios a través del testimonio de personas que presenciaron los hechos y otros recursos de investigación.

El detenido, al que le constan numerosos antecedentes, será citado próximamente para declarar ante la autoridad judicial competente.