Meritxell Budó y Pere Aragonès, esta mañana durante la rueda de prensa / Generalitat de Cataluña

El Govern de la Generalitat ha anunciado esta mañana nuevas medidas restrictivas para frenar el aumento de contagios de Covid-19, que entrarán en vigor a partir del próximo lunes 21 de abril y que se mantendrán hasta el 11 de enero. El sector más perjudicado vuelve a ser de nuevo el de bares y restaurantes.

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Las nuevas medidas las han anunciado en rueda de prensa las consejera de presidencia Meritxell Budó, y el vicepresidente en funciones de presidente de la Generalitat Pere Aragonès, atendiendo a las recomendaciones de Protección Civil de Cataluña.

Los bares y restaurantes sólo podrán abrir al público para servir desayunos de 7:30 a 9:30 horas y comidas de 13 a 15:30 horas. Por la noche, sólo se permite servir comida para llevar entre las 19 y las 22 horas, y el servicio a domicilio se podrá hacer hasta las 23 horas. En las mesas solo podrá haber cuatro personas, seis si son de una misma burbuja familiar.

En estos locales, los clientes deberán tener la mascarilla puesta, a excepción del momento de comer y beber. Es decir, habrá que tener puesta la mascarilla durante el tiempo que se tarda en servir la comanda. Dentro de las franjas establecidas, las condiciones dentro y fuera de los locales serán las mismas que hasta ahora en cuanto aforos y distancias.

Las reuniones sociales se reducen a un máximo de seis personas y para las fiestas de Navidad, los días 24, 25, 26 y 31 de diciembre, y el 1 y 6 de enero, se podrán ampliar a un máximo de 10 personas, incluidos niños, si el grupo es de dos burbujas familiares.

Por lo que se refiere a la movilidad, el confinamiento local de fin de semana pasa a ser comarcal de lunes a domingo desde hoy. Pero este ámbito se puede superar si es para visitar a un familiar que sea de una misma burbuja. De igual modo, se podrá salir de Cataluña y entrar en la comunidad desde el exterior para visitar a un familiar. Y, además, una burbuja de convivencia podrá trasladarse a un destino fijo, como segunda residencia u hotel. Todo apunta que esta matización va dirigida principalmente a los usuarios de las estaciones de esquí.

Por tanto, cualquier otra salida de la comarca y de la comunidad queda prohibida. Respecto a las medidas actuales, se tiende a una flexibilización de la movilidad, lo cuya ha empezado a suscitar críticas de los expertos que piden máyor contundencia contra la interacción social.

Se mantiene el toque de queda de 22 horas a 6 horas de la mañana, con la excepción de Nocebuena y Nochevieja, que se amplía a la 1 hora. La noche de Reyes (5 de enero) el toque de queda comenzará a las 23 horas. Por otra parte, se prohiben los puestos de pajes reales para recoger cartas para los Reyes Magos.

Por lo que se refiere a los centros comerciales, se mantiene la apertura de los comercios que albergan pero los que tienen más de 800 metros cuadrados se limita el aforo al 30%. Además, los bares y restaurante que están en centros comerciales deberán cerrar. Por su parte, los gimnasios no podrán superar el 30% de aforo.

En la rueda de prensa Pere Aragonès ha informado que las medidas adoptadas se revisarán el próximo 28 de diciembre. Ese día, si se detecta que desciendan los contagios, se podían relajar, pero si suben las restricciones previsiblemente se endurecerán.

Otras medidas:

1.- Las actividades culturales se mantienen con un aforo del 50% y cuando no sobrepasen las 1.000 personas.

2.- La actividad escolar se reanudara el 11 de enero y no el día 8 como habría sido lo normal.