Los Mossos d’Esquadra desplegarán este fin de semana un total de 200 controles policiales en diferentes puntos de las carreteras y autopistas de todo el territorio para restringir la movilidad y evitar el desplazamiento hacia segundas residencias.
Casi un millar de policías trabajarán en estos controles, diseñados en el marco del dispositivo Oris, y que tienen por objetivo la aplicación de las medidas de restricción de la movilidad previstas en la normativa especial vigente.
Agentes de las Áreas Regionales de Tráfico, de las Áreas Regionales de Recursos Operativos y de las Unidades de Seguridad Ciudadana se encargarán de llevar a cabo estos controles para revisar que los vehículos que circulan por las vías no están infringiendo las medidas de restricción decretadas desde el pasado 15 de marzo.
Los puntos de control serán fijos y dinámicos para conseguir el máximo de eficacia y restringir la movilidad hacia municipios donde hay segundas residencias. Los agentes desplegados en estos puntos identificarán y denunciarán a todas aquellas personas que circulen sin ningún motivo previsto en la normativa vigente. Recordemos que las sanciones por infringir estas medidas oscilan entre los 600 y los 30.000 euros.
Las actividades al aire libre, como esquiar, pasear, hacer deporte, ir en bicicleta o practicar running están actualmente prohibidas. En este sentido, y aparte de los controles que se establecerán en la red viaria, los mozos también velarán para que no se realicen este tipo de actividades y trabajarán para conseguir que las personas se queden en casa como medida necesaria para evitar la propagación de la Covid-19 y el colapso del sistema sanitario.
En este sentido, desde el Cuerpo de Mossos se pide a la población que siga las medidas decretadas en la actual situación y no salga de casa a no ser por causas de fuerza mayor o las que se prevén legalmente. La responsabilidad de todas las personas es un elemento esencial para afrontar esta emergencia.