Foto de la embarcación facilitada por Mossos d’Esquadra

Agentes de Mossos d’Esquadra de Policía Marítima y de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Bisbal, en coordinación con Salvamento Marítimo, participaron ayer al mediodía en el rescate de una pequeña embarcación que se había accidentado en una zona conocida con el nombre de Banyera de la Russa, entre Calella de Palafrugell y Llafranc.

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Los hechos sucedieron sobre las 12:30 horas, cuando una ola hizo volcar una embarcación de cuatro metros de eslora ocupada por cinco personas, tres adultos y dos niñas. Los tripulantes nadaron hasta las rocas y uno de ellos consiguió escalar hasta llegar a un camino de ronda, donde contactó con un ciudadano y alertó a los servicios de emergencia.

Inmediatamente, la Policía Marítima de los Mossos, que estaba haciendo patrullaje por el litoral gerundense, se dirigió al lugar de los hechos. Una vez llegó a él, comprobó que la barca estaba medio hundida y los ocupantes se habían refugiado en las rocas. En un dispositivo conjunto con Salvamento Marítimo, lograron rescatar a los tripulantes y trasladarlos hasta el Puerto de Llafranc.

Cuando llegaron al puerto, una dotación de Mossos y un ambulancia del Servicio Emergencias Médicas atendieron a las cinco víctimas, dos de ellas menores de edad con hipotermia leve, pero no fue necesario trasladarlos a centros sanitarios .

Seguidamente, se volvió al lugar del incidente para sacar la embarcación, que estaba medio sumergida y sólo se veía la proa fuera del agua, y remolcarla hasta el Puerto de Llafranc por una embarcación de Salvamento Marítimo.

Patrullaje marítimo desde el verano pasado

En verano del año pasado, la Policía Marítima inició el patrullaje por el Área Marítima Norte, estableciéndose una base náutica en el Puerto de Palamós, punto desde donde se planifican los patrullajes y dispositivos para esta zona.

Este servicio diario se ha iniciado con efectivos de la Unidad Acuática con más de 10 años de experiencia realizando servicio en el ámbito marítimo. Desde la puesta en marcha de la base de Palamós han ejecutado diversas actuaciones de asistencia y auxilio, algunas de ellas durante el patrullaje y, otras, en coordinación con otros organismos. Hasta el momento, se han auxiliado varias embarcaciones que, ya sea por problemas técnicos o condiciones meteorológicas, tenían problemas para volver a puerto.

Asimismo, en colaboración con otros organismos han realizado servicios planificados, como es el caso del control de la Cala Golfet por peligro de desprendimientos en coordinación con la Policía Local de Palafrugell. O la actuación, en coordinación con agentes rurales, sobre una red sumergida en un acebuche situado en la localidad de Llafranc, que suponía un riesgo para las personas que practicaban el buceo en la zona.

También se ha participado en una treintena de dispositivos de búsqueda y localización, coordinados por el Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo de Barcelona, ​​especialmente en la búsqueda de bañistas y submarinistas desaparecidos.

Paralelamente a esta actividad operativa, en este momento 33 agentes se encuentran completando su formación específica en intervención en medio marítimo, dividida en dos grandes bloques de contenidos y donde se facilita, entre otros conocimientos sobre el medio marítimo, patronaje de embarcaciones, rescates y salvamento en medio acuático, navegación, legislación marítima, orientación y búsquedas en mar, extinción de incendios, comunicaciones, cartas digitales, medios electrónicos y de seguridad, etc.

Una vez finalizada esta formación, las policías serán destinados a cada una de las tres bases náuticas previstas: la actual de Palamós, Vilanova y la Geltrú y L’Ametlla de Mar, donde combinarán el patrullaje marítimo y terrestre para cada una de las Áreas Marítimas.