Ante el paulatino aumento del número de contagios por Covid-19 en Cataluña, el presidente de la Generalitat, Joaquim Torra, ha anunciado una serie de medidas para frenar el aumento de la pandemia entre la población. Torra ha insistido que las próximas tres semanas son decisivas.
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Torra ha dicho que teniendo en cuenta que «el 70% de los contagios se producen en encuentros con amigos», ha anunciado que «se prohíben las reuniones sociales de más de 10 personas en todo el país tanto en el ámbito público como privado». Y ha situado como «un reto nacional y absolutamente vital» la necesidad «de bajar la actividad y evitar desplazamientos innecesarios». Es decir, ha pedido que disminuyan las interacciones sociales.
Además, explicó que se mantiene el cierre del ocio nocturno y la limitación horaria en la restauración, así como la prohibición de consumo de alcohol y tabaco en espacios públicos. También, siguen vigentes la necesidad de mantener la distancia social, la uso de mascarilla y la higiene de manos.
Sin embargo, el jefe del Gobierno ha advertido que «estas medidas o las que puedan tomar en un futuro no servirán de nada si no somos todos capaces y conscientes de que necesitamos bajar el ritmo, reducir las interacciones sociales».
Dar confianza a la comunidad educativa
En el transcurso de la sesión informativa, el presidente ha anunciado también que ha convocado para mañana, martes, un Consejo Ejecutivo extraordinario, en el que «se concretará el plan de apertura de las escuelas», que ha sido trabajado por las consejerías de Educación y Salud, y ha avanzado algunas de las medidas de este Plan.
Por un lado, Quim Torra ha dicho que «la ratio en las escuelas en primaria será de menos de 20 alumnos por clase. Y, en secundaria y bachillerato, los grupos serán también más reducidos». Además, se harán «500.000 tests en escuelas e institutos de Cataluña entre el 15 de septiembre y el 15 de noviembre», un cribado que ayudará a completar toda la información sobre la epidemia y los contagios en Cataluña.
Por otra parte, «será obligatorio el uso de las mascarillas para los alumnos mayores de 12 años en toda Cataluña y en aquellas zonas con un alto índice de contagios la obligatoriedad será a partir de los 6 años».
El presidente ha subrayado que con este plan «queremos dar un mensaje de seguridad y confianza a la comunidad educativa». En este sentido ha enmarcado la apelación que ha hecho al Gobierno de España «para que regule de manera inmediata un subsidio de conciliación familiar», que se aplicaría cuando los padres tengan que permanecer en casa al cuidado de un hijo afectado por las medidas Covid-19.
Según explicó la consejera de Salud, Alba Vergés, los datos ahora mismo indican que la evolución de la pandemia lleva a un 14 de septiembre lejos de una situación ideal. En este sentido, en la última semana en Cataluña la tasa de incidencia ha aumentado sensiblemente, mientras que la tasa de reproducción ha crecido hasta 1,12.
«Hoy tenemos el reto y la posibilidad de cambiar la tendencia, pero si no hacemos nada la situación se hará más complicada».
Vergés ha avanzado que esta semana está previsto superar los 25.000 test PCR en el conjunto de cribados comunitarios intensivos de Covid-19, así como la aplicación en cuatro municipios -Terrassa, Granollers, Les Franqueses del Vallès y Canovelles- de las siguientes medidas adicionales: restricción al 33% del aforo a los servicios religiosos, y al 50% tanto en el interior como en el exterior de los establecimientos de restauración. La consejera ha insistido en que «cuantos menos y más reducidos sean los encuentros, mejor».
Por su parte, el secretario de Salud Pública, José Maria Argimon, lamentó que, epidemiológicamente, «hemos retrocedido tres semanas y las tenemos que recuperar». Porque en la última semana los contagiados han crecido de 76 a 86 casos por 100.000 habitantes diagnosticados a través de pruebas PCR.
Argimón anunció que «los próximos días crecerá la curva, pero la tenemos que parar. Seremos el más proactivos posibles, pero necesitamos la complicidad de todo el mundo», aseguró Argimon tras poner como ejemplo de proactividad los cribados comunitarios que se harán en los centros educativos, «una medida de estas características nunca hecha en dos meses y que tendrá continuidad más allá».