En el pleno de diciembre del Ayuntamiento de Blanes, además de las buenas voluntades que expresan los portavoces de los grupos municipales, se ha podido disfrutar de dos inesperados regalos prenavideños, que vamos a comentar.

El primero de ellos, el hecho de que la concejala Rosa Aladern haya cesado de sus responsabilidades del área de Actividades y se haya dicho, faltando a la verdad, que asumía las competencias de Vivienda, pues estas las desempeña desde el principio del mandato.

Estamos en WHASTAPP. Clica en este enlace y activa las notificaciones 

Según justificaron el alcalde Jordi Hernández, y la propia Aladern, tanto en las noticias de prensa, como en las intervenciones en el pleno, esta decisión no tiene nada que ver con una serie de actuaciones de la concejala, tanto en este mandato como con el anterior, en el que Blanes en Comú Podem formaba parte, junto con ERC, del Equipo de Gobierno y que provocaron que, por lealtad a la entonces concejala, BeCP abandonase sus responsabilidades, dejando varios proyectos sin terminar.

Lealtad que no fue en ningún momento correspondida por Aladern a nuestro grupo municipal, sino que aprovechándose de su proyección pública como concejala, no dudó en presentarse a las últimas elecciones municipales con su propia candidatura.

Como resultado, Aladern logró entrar en la Corporación y formar parte del actual Equipo de Gobierno de Blanes, pues su voto era decisivo para que el PSC pudiera garantizarse una mayoría absoluta que le permite hacer y deshacer en todo lo relativo a Blanes y su ciudadanía, aunque esto suponga para el PSC cargar con una mochila, que parece llena de actuaciones dudosas, y que puede acabar resultando muy pesada.

El segundo regalito son las declaraciones del alcalde Jordi Hernández, en las que se lamenta que «también debemos decir que tenemos una oposición bastante beligerante. Si te pregunto es por tenerte en cuenta, no porque lo critiques de entrada, sino porque puedas aportar. También hay decisiones que deben ser del gobierno y en este caso quizás la oposición no debe opinar tanto. Pero mi voluntad es que la participación esté ahí».

Parece sorprendente que un servidor público electo no tenga claros algunos elementos básicos de las funciones de los grupos de la oposición, que dado que no gestionan, tienen dos funciones básicas: fiscalizar y opinar. Esto es de primer curso del funcionamiento institucional democrático.

Estamos en TELEGRAM. Clica aquí y síguenos:  t.me/blanesaldia

Más aún cuando el plenario actual está dominado por una forzada mayoría absoluta. Así pues, nos vemos más que obligados a fiscalizar y opinar. Si el alcalde considera que esto es ser beligerantes lo lamentamos, pero lo seguiremos. Y pedimos al Equipo de Gobierno que comparta, comunique y explique las decisiones que toma de forma ya que gobierna para todos los vecinos de Blanes.

Desde el Grupo Municipal de Blanes en Comú Podem, lamentamos la falta de transparencia y comunicación del Equipo de Gobierno y le animamos a que para el 2025 abra las puertas a una transparencia suficientemente abierta, que seguro enriquecerá la gestión de este ayuntamiento.

Blanes en Comú Podem