Desde hace aproximadamente un mes están en marcha las obras de la segunda fase del Parc 11 de Setembre, que tienen un presupuesto de casi 1.520.000 euros. La superficie sobre la que se interviene tiene 8.200 metros cuadrados.
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Las obras, que no incluyen la reforma de la calle Mercado ni de la zona de acceso al parque, cercana a dos establecimientos de restauración, crearán un gran espacio verde y de estancia del vecindario que totaliza unos 13.000 metros cuadrados, cifra en la que se incluyen la superficie del parque de la primera fase de las obras.
Según la memoria elaborada por los arquitectos que han diseñado el proyecto, el parque se compone de tres zonas. La primera es la comprendida entre la nueva plaza Onze de Setembre y la pista deportiva, en la que hay la zona de juegos infantiles.
La segunda es la más amplia y es la zona central, ocupada por la pista deportiva y el local social, que ya está construido y cuya apertura al público podría realizarse antes de acabar este mes.
La tercera zona se extiende entre la pista deportiva hasta aproximarse al plan parcial Costa Brava. En este espacio es donde estuvieron ubicados los módulos prefabricados de la Escola Sa Forcanera.
El objetivo de las obras es convertir el espacio en una nudo urbano, en el que se establezca interacción social en un entorno ecológico, entendiéndolo como infraestructura verde que participa activamente de la gestión del agua y la mejora de la biodiversidad ya que se proyecta un denominado «jardín de polinizadores». Conviene recordar que en la primera fase se construyó un depósito subterráneo de aguas pluviales, que servirá para regar la vegetación del parque.
En el interior del parque se crearán varios caminos secundarios cuya firme será sauló sólido, permitiendo un acabado uniforme, resistente, y antideslizante con una apariencia natural.
Pista deportiva con escenario
Por lo que se refiere a la pista deportiva, tendrá un vallado de entre 2,5 metros y 5,1 metros de altura, lo cual permitirá cerrar todo el espacio por la noche o cuando sea necesario.
La pista tiene capacidad para un campo de fútbol sala, o bien dos pequeñas pistas de baloncesto perpendiculares al campo de fútbol. La pista estará rodeada por un muro de hormigón de un solo nivel que hará la función de grada.
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Además, en un extremo de la pista se construirá un escenario consistente en un muro de hormigón de 21 metros de largo por 11 de ancho, que servirá para acoger grupos de música o participantes en eventos sociales como un espectáculo musical, un mitin político o proyectar una película al aire libre. La pista deportiva tendrá, por tanto, un uso flexible y con funcionalidades diversas. La construcción del escenario requerirá que se arranquen dos plataneros que hay en el lugar.
Jardín de polinizadores
En la memoria, al abordar la zona donde se ubicaron los módulos de Sa forcanera, se menciona la creación de un «jardín de polinizadores» de 700 metros cuadrados «densamente poblado con especies vegetales que ofrezcan un reclamo visual y olfativo importante, a la vez que crean hábitats y ambientes adecuados para la introducción de insectos polinizadors, mariposas, pájaros e invertebrados».
En otro párrafo de la memoria se subraya que se pretende que este «pequeño oasis no solo incremente la biodiversidad del parque sin que también sirva como espacio educativo y de concienciación ciudadana sobre la necesidad de proteger la biodiversidad».
Delante del jardín de polinizadores habrá un espacio para picnic, que consistirá en dos zonas sembradas con especies vegetales características del prado mediterráneo. Se plantará un grupo de pinos que crearán una zona de sombra que propicie la estancia relajada. La zona tendrá mobiliario de picnic como mesas, dos fuentes de agua potable y alumbrado.
Fotos: Blanesaldia.com
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