L’alcalde de Blanes, Àngel Canosa (ERC), i el primer tinent d’alcalde, Jordi Urgell (BECP) / Ajuntament de Blanes

La decisión del alcalde de Blanes, Ángel Canosa (ERC), de expulsar del equipo de gobierno a la concejala Rosa Aladern, responsable de Urbanismo, Ingeniería, Obra Pública y Residuos, ha hecho saltar por los aires el pacto de gobierno entre ERC y Blanes En Comú Podem (BECP), grupo al que pertenece Aladern.

Ayer noche, los miembros de BECP celebraron una asamblea tras la cual la formación emitió un comunicado de prensa en el que responsabilizan a Canosa de haber creado un conflicto innecesario para tener la excusa de dinamitar el pacto de gobierno. 

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En el comunicado se indica que la decisión retirarle la confianza a Aladern, sobre la que que ERC ha lanzado acusaciones de posible gestión deficiente, «no ha quedado fundamentada ni justificada en base a ninguna situación concreta conocida. Además, en el comunicado emitido por ERC se recogen graves acusaciones, sin ningún tipo de concreción ni pruebas, que ponen en duda la honorabilidad y la gestión de nuestra concejala, algo intolerable», afirma BECP.

En otro párrafo se afirma que «esta decisión significa la ruptura unilateral y el incumplimiento, por parte del grupo municipal de Esquerra Republicana, del pacto de gobierno firmado para la legislatura 2019-2023, que recogía tanto las líneas programáticas como el cartapacio municipal».

«Por estos motivos, los concejales y concejalas de Blanes en Comú Podem nos vemos en la obligación de renunciar a todas las competencias delegadas y a continuar formando parte del Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Blanes, de acuerdo con la decisión tomada este lunes por nuestra asamblea».

Maniobra electoralista para las municipales de 2023

La única explicación que BECP encuentra a la creación de este conflicto o ‘casus belli’  es «que sea una maniobra electoralista de desgaste enmarcada dentro de la precampaña electoral para las municipales de 2023. Una decisión de carácter partidista que pone en riesgo la gobernabilidad de Blanes durante estos meses. El principal perjudicado de esta ruptura unilateral del Gobierno no es Blanes En Comú Podem, como quizás algunos quieren creer, sino la ciudadanía de Blanes».

BECP recuerda que este mandato ha estado plagado de grandes dificultades y pedcimientos: el temporal Gloria y los daños en las infraestructuras viarias y ferroviaria, la pandemia y las consecuencias de la guerra desatada por Rusia en Ucrania. Ahora, este verano, parecía que se volvía a vivir en una frágil normalidad.

Precisamente, esa normalidad se ha esfumado con la ruptura del gobierno local de Blanes. BECP reivindica en el comunicado haber hecho un buen trabajo desde el equipo de gobierno, solucionando problemas «a pesar de las diferencias de criterios e intereses, pensando siempre en lo mejor para nuestra ciudad» y sus habitantes. 

«Por todo ello, lamentamos haber llegado a esta situación que nos obliga a tener que abandonar proyectos que ya están en marcha o debían empezar ahora, y que esperamos que, a pesar de todo, se lleven a buen término por el bien de Blanes».

Por último, BECP afirma que estudiarán «cuáles son las acciones adecuadas a tomar ante estos lamentables hechos, a todos los niveles, y continuaremos trabajando con la misma ilusión y el mismo compromiso que hemos tenido siempre con nuestro municipio, ya sea en el gobierno, en la oposición o a pie de calle».