El Consejo Ejecutivo de la Generalitat declaró ayer la emergencia de la obra de reconstrucción del puente sobre el río Tordera, que conecta Malgrat de Mar y Blanes, para la que ha destinado una partida de cerca de 5,3 millones de euros.
Los trabajos de reconstrucción de la estructura, que quedó gravemente dañada por la borrasca Gloria, tendrán un plazo de ejecución de unos 10 meses y ya se han iniciado las tareas previas.
Las inundaciones del 21 y 22 de enero pasados, como consecuencia del temporal Gloria, afectaron gravemente el puente sobre el río Tordera que une las carreteras BV-6001 y GIP-6831, titularidad de la Diputación de Barcelona y Girona respectivamente, por lo que el tráfico de vehículos quedó cortado en este punto. Por este ámbito circulan diariamente una media de más de 8.000 vehículos diarios.
Para reconstruir el puente y poder restablecer la circulación con la mayor brevedad posible, se ha declarado la emergencia de esta obra. El nuevo puente, que se ubicará en el mismo emplazamiento que el anterior, tendrá una longitud de cerca de 220 metros y una anchura de 13 metros. Contará con una acera para peatones en cada sentid de tres metros de ancho.
En 2016 la Generalitat anunció que se construiría un nuevo puente al considerar que haía quedado obsoleto. Pro de esta obra nada se ha sabido hasta después de la tormenta Gloria. El hecho de que los trabajos hayan empezado con celeridad y que se conozca el importe de la obra induce a pensar que ya se cuenta con el proyecto constructivo.
El derribo de la calzada que quedó en pie sobre el Tordera comenzó el pasado jueves 20 de febrero. Las obras de derribo finalizarán la próxima semana. Los pilares del puente serán derruidos parcialmente pues en parte se aprovecharán para la nueva estructura viaria. El puente tendrá una altura superior a actual, para que en caso de crecida futura del río no se vea perjudicado el tráfico de vehiculos.