Una pequeña actuación en una zona muy frecuentada de la ciudad
Es una reforma nada aparatosa y, por tanto, cuesta percibirla. Cuatro de los 40 bancos instalados en el paseo del mar lucen desde hace unos días unas relucientes y robustas maderas, que constrastan con las ajadas y astilladas del resto de bancos, que practicamente nunca -y llevan muchos años dando descanso al paseante- han recibido mantenimiento.
Están situados cerca del Banc dels Musics
Es una reforma mínima, que revela que al menos hay algo de dinero en el Ayuntamiento para mejorar el mobiliario y los elementos urbanos más deteriorados.
Y los bancos del paseo del mar presentan un deplorable estado, que ven a dario cientos de personas, sobre todo los meses de verano.