Por ahora, la Semana Santa en Blanes se escabulle del mal tiempo y ofrece a los residentes y turistas un tiempo que roza el calificativo de espléndido. Aunque la primeras horas de la tarde del Jueves Santo llovió de forma tenue, la inclemencia meteorológica cesó a tiempo, para permitir que los Manaies de Blanes ofreciesen a partir de las 17,30 horas un completo y prolongado desfile por los barrios de La Plantera, Racó d’en Portes y el centro de la ciudad.
Hoy, Viernes Santo, la jornada ofrece una tiempo mayoritariamente soleado que ha tenido su momento culminante al medio día, cuando miles de personas has paseado por el Passeig de Mar, Passeig de la Marina i Passeig s’Abanell. Incluso se ha podido ver a varios cientos de personas en la playa tomando el sol, además de registrarse un gran número de personas en las terrazas de los bares y los bancos del frente marítimo de la ciudad.
Las vacaciones de Semana Santa suponen tradicionalmente de facto el inicio de la temporada turística, que arranca con la reapertura de algunos locales de restauración y hoteles que han permanecido cerrados durante el pasado invierno.
A partir de hora la previsión es que la llegada paulatina de turistas y las visitas de fin de semana y festivos de las personas que tienen en Blanes su segunda residencia se incrementen hasta la llegada del periodo vacacional, cuando Blanes muestra su perfil más turístico y cosmopolita.
En definitiva, Blanes pone estos días punto y final al invierno e inicia con la primavera el cambio de ciclo de hábitos, imprimiendo un mayor dinamismo a la ciudad y sus negocios. La previsión de buen tiempo para los próximos días augura que este inicio de temporada se saldará con una buena nota.