Cuando solo quedan siete meses para la celebración de las elecciones municipales, el equipo de gobierno de Blanes ha imprimido un giro a su política en materia de turismo. El lugar para visualizar los cambios se produjo ayer noche durante la celebración del pleno del mes de octubre.
En primer lugar, se dio cuenta de un decreto de alcaldía mediante el cual se ha nombrado como nueva técnico de Turismo a Teresa Trillo, que sustituye a Xavier Vall, que ocupaba el cargo desde mayo de 2012.
Vall empezó a desempeñar sus funciones cuando el anterior responsable, Jaume Dulsat, pidió la baja para trabajar en otro empleo. El cambio se produjo cuando la legislatura llevaba casi un año en marcha. Se da la circunstancia de que el experto en materia de turismo local es el único cargo de confianza que hay en el Ayuntamiento.
El alcalde de Blanes, Josep Marigó, recordó ayer que se mantuvo a Dulsat porque se valoró que su trabajo en la anterior legislatura (2007 a 2011, que fue gobernada por CiU, PP y PDB) fue positivo. Insinuó que se había perdido la confianza en Vall y que el perfil del responsable de Turismo es «más técnico que político». Aseguró que no se ha producido un nombramiento «de partido», a pesar de tratarse de un cargo de confianza, y que la persona escogida «se ha consensuado con el sector turístico».
Posteriormente, el turismo volvió a protagonizar la sesión al aprobarse la creación del Consejo Municipal de Turismo (CMT) por 16 votos a favor (PSC, CiU y PP) y cuatro en contra (EUiA-ICV). En este vídeo, la concejala Lara Torres, responsable entre otras áreas de Turismo y Comercio, explica las funciones del nuevo órgano, que previsiblemente estará formado por una veintena de personas.
Conviene recordar que la política del Ayuntamiento de Blanes en materia de turismo ha cojeado desde que el pleno de junio de 2012 aprobó disolver el Patronato de Turismo de Blanes . Aunque entonces se vendió su extinción como positiva por ser un órgano anticuado, lo cierto es que se realizó siguiendo las directrices del Gobierno del PP, en el sentido de adelgazar la Administración Pública suprimiendo o fusionando organismos y empresas teóricamente ineficaces. Entonces, estaba en juego el millonario crédito (14 M€) del Gobierno al Ayuntamiento para pagar a proveedores.
Josep Llambí, del PP, consideró que es necesario que el CMT promueva y oriente la política turística al ser fundamental para la vida económica de la ciudad. Se quejó de que a priori no se contemple contar con el sector del ocio.
La desaparición del Patronato la lamentó en su día con especial enjundia el grupo de EUiA-ICV. Sin embargo, ayer la concejala de EUiA-ICV, Amparo Ardanuy, echó en falta que en el CMT no figuren las asociaciones de vecinos y los sindicatos, pues dijo que el turismo afecta directamente a los vecinos de Blanes. Al no figurar las entidades vecinales consideró que es una muestra más de como el equipo de gobierno cercena la participación ciudadana. Ardanuy defendió que el CMT sirva para plantear propuestas que conduzcan a mejorar el «modelo» turístico de la ciudad.
#pleblanes Consell Mun Turisme PSC una eina al servei sector empresaris sense representacio de veins ni sindicats. Participacio ciutadana?
— ICV-EUiA Blanes (@icveuiablanes) October 30, 2014
Por su parte, Joaquim Torrecillas, argmentó que «hacía falta un organismo sustitutivo» del patronato. Consideró «absolutamente imprescindible» que en el CMT no figuren responsables de las fuerzas de seguridad, pues afirmó que son los expertos indicados en plantear directices que prevengan posibles conflictos del turismo con los residentes en la población. Sobre esta cuestión, Lara Torres le respondió que el CMT podrá convocar cuando se reúna a los expertos que se considere convenientes.
Recordar, por último, que la revitalización de la política turística de la población comienza con el reciente anuncio de que se proyecta reformar la oficina de turismo situada en la Plaza de Catalunya.