La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Blanes ha estimado el recurso de reposición presentado por el representante del bar musical Cotton Club, ubicado en la calle Josep Tarradellas, que el pasado mes de noviembre fue sancionado con el pago de una multa de 12.000 euros por vulnerar la ordenanza municipal de protección contra la contaminación acústica al causar reiteradas molestias a una vecina. Un mes después se comunicó al dueño del bar la multa.
El motivo que ha originado la estimación del recurso es la «caducidad del procedimiento sancionador», según se indica en el acuerdo de la junta de gobierno, con lo cual el denunciado no deberá pagar la multa.
En el acta de la junta de gobierno se explica que el expediente sancionador se inició el 16 de abril de 2010 y que la fecha de la notificación de la sanción fue el pasado 13 de diciembre, habiendo transcurrido más de seis meses, que es el plazo de tiempo que establace la normativa de este tipo de procedimientos administrativos, si el expediente no se paraliza por causas imputables a los interesados.
Se da la circunstancia de que la vecina presentó ante la policía local numerosas quejas entre 2006 y 2009, siendo la última en julio de 2009. En enero de 2010 la policía local realizó una medición sonométrica en la vivienda de la afectada, que determinó que los niveles de ruido eran de 41,12 decibelios, superior a lo permitido. Esta medición fue la única prueba objetiva que tuvo validez para iniciar el expediente.
Texto, foto y edición: José Fernández