El juzgado de primera instancia e instrucción número de 2 de Blanes ha admitido a trámite la querella que presentó el presidente del Club Hoquei Blanes contra el alcalde de Blanes, Josep Marigó, su esposa y el inteventor del Ayuntamiento, Francisco Lucio. A fin clarificar las acusaciones de la entidad, los querellados están citados a declarar el próximo 16 de junio.
En la querella se les acusa haber incurrido en delitos de prevaricación y tráfico de influencia, que presuntamente habrían cometido entre 2003 y 2007, cuando Marigó era alcalde. Según la acusación, los querellados participaron en la elaboración y aprobación de un convenio entre el Ayuntamiento de Blanes y la Escuela de Música, que comportó que recibiese una subvención de 40.000 euros al año. El convenio tenía una vigencia de dos años, prorrogable por otros dos.
En la querella se argumenta que la subvención se aprobó sin estar debidamente justificada. El presidente de Club Hoquei Blanes, Josep Ridaura, impulsor de la querella sostiene que el dinero salió de la “partida de alcaldía” y que la petición de subvención de al Escuela de Música carecía de una justificación de cuentas”, según informa Diari de Girona.
Se da la circunstancia de que la mujer de Marigó era miembro de la junta de la Escuela de Música cuando se concedió la subvención, motivo por el cual Ridaura considera que hay una estrecha relación de intereses entre el Ayuntamiento y la Escuela, que presuntamente configuraría el delito de tráfico de influencias.
Por otra parte, la inclusión del interventor en la querella se debe a que, por su cargo, era el responsable de validar la documentación de la subvención.
El mismo día que declaren los querellados, lo hará Ridaura como querellante. La juez ha solicitado a los querellados que aporten la documentación relación con el caso.
Por ahora no se ha producido una respuesta por parte de Marigó, que se encuentra en Ardales (Málaga) desde el pasado fin de semana junto con medio centenar de vecinos de Blanes originarios del municipio malagueño, en el tradicional viaje de confraternización que promueve la Casa de Ardales de Blanes.
Con esta ya son dos los procedimientos penales en los que están impicados Marigó y el interventor. El primero se concretó el pasado mes de noviembre cuando la titular del juzgado 3 de Blanes admitió la querella que presentaron los representantes del Partido Democrático de Blanes y Josep Ridaura por presuntos delitos contra la ordenación del territorio y tráfico de influencias, pues supuestamente dieron durante la legislatura 2003 – 2007 una licencia de obras de forma irregular y dejaron de cobrar varios recibos del impuesto de bienes inmuebles (IBI).