Los alcaldes de Calella y de Pineda de Mar, Marc Buch y Xavier Amor respectivamente, reclamaron ayer a la Generalitat que mejore la salida de la autopista C-32 y la conexión con la N-II.
Buch y Amor han enviado una carta al consejero de Territorio de la Generalitat, Juli Fernández, reclamando la conveniencia de adoptar medidas urgentes como, por ejemplo, la iluminación de este tramo para reforzar su seguridad.
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Ambos alcaldes han comparecido en rueda de prensa en el Ayuntamiento de Calella después de firmar la carta. Explicaron que la zona de salida de la autopista registra una siniestralidad evitable con la adopción de medidas rápidas y urgentes.
Además de una señalización más eficaz y de una iluminación que actualmente es inexistente, Buch y Amor consideran que es muy importante que se revisen los cierres perimetrales de la autopista C-32 y de su salida para evitar el accidentalidad con fauna cinegética.
El pasado 6 de febrero se produjo un accidente mortal de un vecino de Mataró, profesor del Instituto Joan Coromines de Pineda de Mar, que chocó frontalmente con un grupo de jabalíes precisamente en el tramo que carece de iluminación.
No es la primera vez que ambos alcaldes colaboren en temas vinculados en sus dos municipios. Hace unos meses también se encontraron para coordinarse en materia de seguridad.