Desalojan a 18 personas que ocupaban un antiguo hostal de Calella mediante un decreto de la alcaldesa

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Ayuntamiento de Calella

En la acción han intervenido miembros de la Policía Local de Calella, los Mossos y del Cuerpo Nacional de la Policía, que han hecho varias detenciones por incumplimiento de la ley de extranjería y por tentativa de homicidio

El Ayuntamiento de Calella ha instado el desalojo del edificio de la calle Diputació nº30, conocido como la Bruna, en el antiguo Hostal la Gaviota. La alcaldesa ha firmado el decreto para proceder con la operación después de que los técnicos del consistorio confirmaran la inhabitabilidad del edificio y el peligro que representaba para las propias personas que lo ocupaban.

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La operación, en primer momento, ha consistido en determinar el estado del edificio: sistema eléctrico, peligro de incendio, insalubridad, problemas de agua potable, etc. Tras detectar todos los problemas que hacían imposible la habitabilidad del inmueble, la alcaldesa ha firmado el decreto a través del que la policía ha podido informar a cada ocupante de la obligación de abandonar la Bruna.

Policía Local de Calella

Se ha desalojado un total de 18 personas. No había ningún menor, ningún joven extutelado, ni ninguna persona en situación vulnerable. Todos eran mayores de edad y se ha detenido a 5 individuos: 4 por incumplimiento de la Ley de Extranjería y 1 por tentativa de homicidio doloso.

Este desalojo responde a un clamor de la ciudadanía de Calella, concretamente de los vecinos que viven en la zona; que hoy han podido poner fin a una situación conflictiva. El presidente de la asociación de vecinos, Juan Reyes, aprovechó para «dar las gracias a la alcaldesa. Han sido momentos muy duros para nosotros, y siempre hemos tenido el apoyo máximo de la administración. También quiero agradecer la implicación de la Policía Local y de los otros cuerpos de seguridad, que han hecho todo lo posible para que podamos reencontrar la paz en nuestro vecindario».

Policía Local de Calella

La alcaldesa, Montserrat Canndini; el regidor de las Áreas de Seguridad y Movilidad, José Torres; y el inspector jefe de la policía local de Calella, David Otal, explicaron que había que acabar con una situación insoportable. Utilizando las mismas palabras que escribió al presidente de la Audiencia Provincial, el temor del Ayuntamiento era que la evolución de la degradación de la Bruna acabara con una tragedia.

La propiedad del edificio procederá a tapar los accesos al antiguo hostal con el objetivo de que no pueda ser ocupado de nuevo. Montserrat Candini ha celebrado el desenlace de la operación y ha declarado que «nosotros siempre hemos trabajado para dar tranquilidad y estabilidad a los vecinos y para garantizar la seguridad de las Calella y los calellenses. Pero, en todo este proceso, que hemos estado atados de pies y manos, nos hemos sentido solo acompañados por los vecinos».

Según informa Radio Calella, «los ocupantes del inmueble se vinculan con numerosos hechos delictivos en las últimas semanas en la ciudad de Calella y en poblaciones vecinas. La alcaldesa ha explicado en rueda de prensa que el nivel delincuencial era preocupante y aseguró que el incendio reciente en el edificio ha sido ‘el punto de inflexión’ para hacer el desalojo vía decreto de alcaldía».

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