El Molí d’en Puigvert, en Palafolls, acogió ayer tarde la presentación y constitución del ente gestor del Espacio Agrario del Bajo Tordera (EABT), un proyecto promovido por la Diputación de Barcelona y los cinco municipios de la zona que lo integran: Palafolls, Malgrat, Tordera ,Santa Susanna y Blanes.
El objetivo es proteger el suelo agrario de las poblaciones mencionadas y garantizar la alimentación de proximidad. Los cinco municipios que integran el EABT están situados en una de las zonas más fértiles de Cataluña: la parte baja y desembocadura del Tordera, entre el Parc del Montnegre i el Corredor, y las playas de la Selva Litoral y el Alt Maresme.
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El acto de presentación del ente gestor lo encabezaron los alcaldes de las cinco poblaciones: Francisco Alemán (Palafolls), Joan Mercader (Santa Susanna), Juan Carlos Cañizares (Tordera), Joan Campolier (Santa Susanna) y Àngel Canosa (Blanes), así como el diputado de Espacios Naturales y Prevención de Incendios Forestales de la Diputación de Barcelona, Josep Tarin. Al acto asistieron representantes de los agricultores y de las tres cooperativas agrarias del territorio, así como de instituciones supramunicipales y del Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA).
Durante la presentación se firmaron los estatutos de constitución del ente gestor del EABT y se dio a conocer el Plan de Gestión y Desarrollo del Proyecto, un documento que reconoce el alto valor económico, social y ambiental del territorio. El acto contó con las intervenciones del diputado José Tarín; el alcalde de Palafolls, Francisco Alemán, en representación de los municipios que integran el nuevo espacio agrario; el gerente de la Cooperativa Agrícola Progreso-Garbí, Xavier Castells; y Miquel Riera, productor agroecológico de la Huerta Plan de Munt.
Más de 2.300 hectáreas de cultivos
El Espacio Agrario del Bajo Tordera concentra cerca de la mitad de la superficie agraria de toda la comarca del Maresme y una parte de la Selva Marítima. En total, más de 2.300 hectáreas de campos de cultivos quedan amparadas con la creación de este espacio agrario, que dedica un 70% de sus tierras a cultivos de regadío y un 30% a los de secano.
La huerta se concentra, sobre todo, en Palafolls, Blanes y Malgrat de Mar, mientras que Tordera destaca por los cereales y los forrajes. De explotaciones ganaderas hay censadas 46, agrupadas principalmente en los términos municipales de Tordera y Palafolls. El Plan de Gestión y Desarrollo del EABT destaca también otros datos interesantes, como por ejemplo que la mayoría de explotaciones hortícolas del territorio son pequeñas y familiares, con dimensiones de entre 2 y 5 hectáreas.
El 56% de las tierras de cultivo son de propiedad, y el perfil de campo del EABT es un hombre de poco más de 50 años, con estudios de formación secundaria y sin relevo generacional. El 20% de los titulares de las explotaciones agrarias son mujeres; y entre la mano de obra directa e indirecta hay un millar de ocupados en el sector de la huerta.
Aumentar los cultivos ecológicos
Con el Espacio Agrario del Bajo Tordera la Diputación de Barcelona hace una apuesta por la conservación del paisaje agrario, tradicional y diverso del valle bajo del Tordera y situar este territorio a la vanguardia de las políticas agrarias y alimentarias que se están diseñando para la demarcación de Barcelona con horizonte 2030. Desde la Dirección Territorial Agraria se remarca que esta es una zona muy dinámica y bien organizada, que cuenta con el suelo agrícola más productivo por unidad de superficie de la Región Metropolitana de Barcelona.
Con todo, no está exenta de peligros. De acuerdo con los últimos datos de que se dispone, el espacio del bajo Tordera ha perdido el 52% de la superficie agraria desde los años 50 del siglo pasado. Concretamente, 2.572 hectáreas, un área equivalente a 3.600 campos de fútbol, con una tendencia que se quiere detener con la creación del EABT.
Otro reto a abordar es el hecho de que, actualmente, sólo el 8% de los cultivos del EABT se trabajan de manera ecológica, y la mayor parte son cereales. Este porcentaje aún queda muy lejos del objetivo marcado por la Unión Europea de conseguir que el 25% de las tierras agrícolas sean ecológicas antes de 2030. Para lograr este objetivo e impulsar el territorio hacia un sistema alimentario más saludable y sostenible el EABT debería ampliar en 242 hectáreas la superficie de cultivo dedicada a la agricultura ecológica.
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