Mañana martes entrará en vigor la normativa relacionada con la seguridad vial que el Gobierno aprobó mediante un Real Decreto el pasado 11 de noviembre. Se trata de la limitación de velocidad en las calles de las poblaciones de toda España, para mejorar la seguridad vial y reducir la siniestralidad, en especial los atropellos de peatones.
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De este asunto Blanesaldia.com ya informó en este enlace cuando el Gobierno aprobó el Real Decreto. Recordemos lo esencial de la normativa, muy fácil de memorizar: el limite de velocidad pasa de 50 a 30 km/h en las calles de un único sentido y también en las que tienen un solo carril por sentido. En aquellas en las que hay dos carriles de circulación por sentido, como en la Avenida Europa, se mantiene el máximo de ir a 50 km/h.
Además, en las calles de plataforma única de calzada y acera, sin diferencia de altura, el límite será de 20 km/h. En este apartado entra la calle Ample y el tramo de la Rambla Joaquim Ruyra, entre la plaza de la Solidaritat y la plaza de Catalunya.
El motivo de rebajar la velocidad en los núcleos urbanos se debe a las rotundas conclusiones de los que estudios que se han realizado: un atropello por un vehículo que circula a 30 km/h solo causa un 10% de mortalidad. En cambio, este porcentaje llega al 80% si el vehículo impacta en el peatón a 50 km/h.
La normativa entra mañana en vigor al cumplirse seis meses desde su aprobación. Ese tiempo debía servir para que los ayuntamientos adaptasen las señales de tráfico a la nueva normativa. Así, en calles de muchos municipios han proliferado en el asfalto señales con la cifra ’30’ enmarcada en un gran círculo.
El gobierno de Blanes, liderado por los independentistas de ERC, ha camuflado la entrada en vigor de estos cambios en el Reglamento General de Circulación adhiriéndose a una campaña que cuenta con la simpatía de la ONU y que lleva por lema Streets for Life (Calles para la Vida) y el hastag #Love30. Este lema corresponde a la 6a Semana Mundial de Naciones Unidas para la Seguridad Vial, que se celebrará del 17 al 23 de mayo.
Para rubricar su distanciamiento de la normativa impulsada por la Dirección General de Tráfico (DGT), el Ayuntamiento ha hecho imprimir unas placas con un corazón de colores y el ’30’ en su interior y las ha colgado en zonas en las que, al rivalizar con las señales oficiales de la Dirección General de Tráfico, pueden generar confusión.
En cambio, donde sí hay señales oficiales del nuevo límite de velocidad es en los viales de Plan Parcial Costa Brava, donde pueden verse señales horizontales y verticales informando del límite de velocidad. Esta señales las han colocado y pagado los responsables del citado Plan.