El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Tossa de Mary se ha posicionado, a través de una moción presentada en el pleno municipal, en contra del proyecto de prolongación de la autopista C-32 en Tordera y Lloret de Mar.
También estamos en Telegram. Para recibir en tu móvil nuestras noticias al instante, clica aquí y síguenos: t.me/blanesaldia
En este sentido, solicita a la Generalitat la reconsideración del proyecto y el estudio de alternativas de menor impacto ambiental y paisajístico y de menor coste económico, como podría ser el posible desdoblamiento de la carretera GI-600 de Blanes a Lloret.
El equipo de gobierno, formado por Junts per Tossa, Endavant Tossa y ERC, ha impulsado esta moción a raíz de la redacción y aprobación por parte de la Generalitat durante el año 2020 de una tercera versión del estudio informativo y del estudio de impacto ambiental del proyecto.
Según el equipo de gobierno de Tossa, los impactos que resultarán de la ejecución del proyecto, son, entre otros, los siguientes:
1.- Pérdida de un importante pulmón forestal.
2.- Afectación a 55 hectáreas de terrenos forestales.
3.- Tala de más de 60.000 ejemplares de árboles.
4.- Implantación de una infraestructura de 3 carriles con túneles y viaductos.
4.- Impacto sobre las principales arroyos y cursos de agua de la zona.
5.- Impactos sobre el paraje del Vilar de Blanes, el área de Sant Pere del Bosc de Lloret y los bosques de la zona.
6.- Afectación en todo el drenaje de la zona y en áreas inundables.
7.- Creación de una importante cicatriz en los bosques de la Selva Marítima.
8.- Importante generación de contaminación acústica y atmosférica.
9.- Grandes movimientos de tierras.
El concejal de Medio Ambiente de Tossa, Ramon Gascons, afirma que «la Generalitat declaró la emergencia climática el pasado mes de mayo de 2020. En cambio, la implantación de una macroinfraestructura viaria como es un autopista con tres carriles , túneles y viaductos y grandes movimientos de volumen de tierras en el contexto de emergencia climática constituye impulsar una política vial difícilmente compatible con las necesidades de la lucha contra el cambio climático».
Gascons concluye que «el proyecto de obra es de poco más de 6’7 kilómetros y tiene un presupuesto superior a 65 millones de euros». Frente a esta opción el equipo de gobierno pide alternativas viables de menor coste y cuyo impacto ambiental y paisajístico sea,empr, como el desdoblamiento de la GI-600 de Blanes a Lloret o la ejecución de la Ronda Norte de Blanes».