El Ayuntamiento de Tossa de Mar ha aprobado suspender durante seis meses la concesión de nuevas licencias de viviendas de uso turístico en todo el término municipal. El objetivo de esta medida, según la alcaldesa Imma Colom, es «ordenar la situación y combatir las prácticas ilegales que provocan una clara competencia desleal hacia el empresario que sí hace bien su trabajo».
Y es que, a día de hoy, y según datos de la Oficina de Turismo, el ayuntamiento tiene contabilizados 1.181 viviendas de estos características con una capacidad para 7.089 personas que, de media, realizan una estancia de 7 días en la población. Hay que recordar que las viviendas de uso turístico son aquellas viviendas ya amueblados y dotados para su ocupación inmediata, alquilados por estancias de temporada que no superan los 31 días.
Desde la aprobación en el año 2016 del Plan Especial de Vivienda de Uso Turístico de Tossa, la demanda de este tipo de actividad no ha parado de crecer y, desde el Ayuntamiento, se manifiesta la necesidad de impulsar alguna medida para completar la regulación existente y ordenar la oferta, anticipándose a posibles problemas potenciales de convivencia.
Y es que se ha detectado que esta actividad puede generar problemas especialmente cuando convive en un mismo edificio con vecinos habituales, problemática que se agudiza si son inmuebles con falta de aislamientos acústicos, espacios comunes no adecuados y cuando no se dispone de una gestión profesionalizada de la actividad.
Ante esta situación, el Ayuntamiento de Tossa ha optado por reordenar y regular urbanísticamente tanto las condiciones de implantación y desarrollo de la actividad como la localización dentro del término municipal con el objetivo de alcanzar el equilibrio entre el derecho a realizar la actividad y la garantía de una ciudad sostenible. Por este motivo, se modificará el plan especial vigente y se determinará por cada sector de la población las condiciones con las que esta actividad se podrá llevar a cabo. Para hacer esto, se ha suspendido cautelarmente y durante 6 meses el hecho de dar nuevas licencias de viviendas de uso turístico en todo el término municipal.
La alcaldesa Imma Colom explica que «creemos también que la proliferación de esta actividad está perjudicando el acceso al alquiler todo el año de gente joven o trabajadores de temporada».