El pasado lunes se realizó en la sala de plenos del Ayuntamiento de Blanes la presentación del proyecto de reforma de la Plaça dels Dies Feiners, que tiene una superficie de 1.600 metros cuadrados.
La explicaciones corrieron a cargo del arquitecto Lluís Bedós, autor el proyecto, de la concejala de Urbanismo y Obra Pública, Pepa Celaya, y del alcalde de Blanes, Mario Ros. El diseño se escogió entre cinco finalistas, después de que inicialmente se presentaron 28 propuestas a la convocatoria abierta a través de un proceso iniciado en julio del año pasado. La obras se han presupuestado en 700.000 euros. Es obvio que comportarán eliminar el actual pavimento y actuar en el subsuelo, para acondicionarlo para la captación y canalización de aguas pluviales, antes de instalar el nuevo pavimento y mobiliario urbano.
Durante el encuentro, uno de los aspectos que más interesó conocer -aparte de las características específicas del proyecto- fue saber cuándo será realidad el nuevo aspecto que tendrá la plaza. En este sentido, si se cumplen los plazos previsto, la nueva podría estar acabada en el verano de 2019.
Los pasos a seguir ahora es aprobar el proyecto definitivo en Junta de Gobierno, pasar un período de exposición que de 30 días hábiles, la ampliación de crédito para financiar la obra, la aprobación definitiva del proyecto, la licitación de las obras y la ejecución de las obras, que podrían comenzar el próximo mes de diciembre. El plazo de ejecución serán cinco meses.
Escenario de 22 metros cuadrados
El principal objetivo del equipo de gobierno a la hora de pensar en la remodelación de este espacio es que se convierta y se utilice realmente como una plaza, un lugar de encuentro y esparcimiento, priorizando a los viandantes y las actividades lúdicas.
Lluís Bedós ha diseñado un espacio con piezas de hormigón prefabricado de diferentes colores, y una pérgola de casi tres metros. También habrá bancos para sentarse, y se plantarán almeces y árboles del amor alrededor. Una de las reformas más radicales será una superficie de escenario enlazando con el acceso posterior al Ayuntamiento de Blanes. Tendrá 22 metros cuadrados de superficie y seis metros y medio de ancho,
Los vehículos no podrán aparcar
Durante el encuentro el pasado lunes, en la que los asistentes valoraron positivamente los cambios que se quieren hacer, también se trató otra de las preocupaciones que surgió a lo largo de la presentación. Actualmente, los vehículos de reparto y abastecimiento de los comercios y establecimientos de restauración pueden aparcar durante unas horas establecidas, así como los vehículos autorizados.
Esto se quiere eliminar para que sea realmente una plaza para que la utilicen los peatones, por lo que se están planteando varias opciones. Una de las que se está estudiando es la posibilidad de abrir un circuito en el centro urbano actualmente exclusivo para peatones. La idea sería que los vehículos de reparto accedieran por la Calle Muralla y siguieran por la Calle Raval para enfilar la Calle Ancha de salida. La apertura se haría sólo durante unas horas al día, y el resto continuaría como está actualmente, es decir, sin acceso de vehículos a motor.
Así lo avanzó durante el encuentro el sargento Paco Rodríguez, responsable de Movilidad y Seguridad Vial de la Policía Local de Blanes. En este sentido, adelantó que durante los meses que duren las obras, cuando tampoco se podrá acceder a la Plaça dels Dies Feiners, será el momento de probar esta opción y decidir si es viable o no.