La reforma organizativa de la Policía Local de Blanes será uno de los puntos que el equipo de gobierno llevará al pleno del mes de mayo, que se celebrará el próximo jueves. Se proyecta la creación de una unidad de policía administrativa, que hará funciones de inspección y otra de policía de proximidad.
La concejala de Seguridad, Pepa Celaya, manifestó que «por primera vez se ha definido un modelo de policía, consensuado con las diferentes fuerzas políticas y los protagonistas implicados». Celaya considera que se han definido tanto las «funciones y responsabilidades» de los agentes como «las categorías y objetivos operativos del cuerpo», lo cual servirá para potenciar el perfil profesional de cada agente en la estructura del cuerpo.
Los tres objetivos internos y organizativos de Policía Local son: 1. la modernización y desarrollo de la organización y de los sistemas de gestión; 2. la optimización de los servicios y los procedimientos y 3. la mejora de los recursos humanos y materiales, incluido dotar al cuerpo de unas nuevas dependencias.
Además, se aspira a mejorar la calidad del servicio que prestan, fomentando la especialización entre los agentes, lo cual favorecerá que se mejore la percepción social que tienen los ciudadanos de los agentes locales, pues se proyecta potenciar las patrullas a pie o motorizadas.
Se han fijado cinco objetivos del servicio que prestan los agentes. Son:
1.- Mejorar la seguridad viaria y la movilidad de los vehículos, a través de campañas específicas.
2.- Mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, interviniendo en molestias relacionadas con el ruido, la contaminación de los vehículos, ruido de locales, defecaciones de perros en la vía pública y en general, velando por incrementar el cumplimiento de la ordenanza de civismo y convivencia.
3.- Alcanzar una mayor cuota de seguridad ciudadana manteniendo la presencia policial en la vía publica a fin de prevenir y combatir las conductas delictivas. En este aspecto se incide en que las actuaciones han de ser coordinadas con los Mossos de Esquadra, de forma que se disponga de un mapa actualizado de los lugares donde más proliferan las conductas antisociales.
4.- Creación de una nueva unidad de policía administrativa. Su cometido será velar por el cumplimiento de la legalidad de las actividades de los establecimientos de pública concurrencia. Se fiscalizará la actividad de los negocios, en el sentido de que se ajustan a la licencia que poseen.
Para llevar a cabo esta labor de control se actualizará el censo de establecimientos a través de una campaña específica. Este censo recopilará datos como si poseen alarma antirrobos, y datos de sus propietarios o responsables, a fin de localizarles con celeridad ante cualquier incidencia que les afecte.
Una de las primeras tareas de esta futura unidad de la policía, cuya creación aún puede tardar dos años pues está sujeta a la ampliación de la plantilla del cuerpo en cuatro plazas, es efectuar la inspección de todos los establecimientos que pueden afectar el descanso de los vecinos. También se dedicaría a controlar la venta ambulante, el reparto de propaganda sin permiso, contgrol de mercados, colocación de publicidad en lugares no autorizados y ocupaciones de la vía publica en general.
5.- Creación de la policía de proximidad, que se proyecta como un grupo de agentes asignados a una zona del núcleo urbano de Blanes que alcanzará diversos barrios. Estos agentes deberán conocer a fondo el funcionamiento de la administración municipal a fin de asesorar al ciudadano ante cualquier solicitud de información. Además, el agente facilitará información a los departamentos del Ayuntamiento, informando de las irregularidades y problemáticas que detecte.