El pleno del Ayuntamiento de Blanes celebrado ayer aprobó una moción mediante la cual se da luz verde para que se realice una consulta popular sobre el proyecto de prolongación de la C-32 entre Blanes y Lloret de Mar. La segunda moción tiene por finalidad que el tramo urbano la carretera GI-600 entre la rotonda de Mas Cremat y la conocida como de los fuegos pase a ser de titularidad municipal.
La primera moción se aprobó por 13 votos y ocho abstenciones, estas ultimas correspondientes a los concejales del equipo de gobierno (PSC y CiU). La moción de la defendió Jordi Gaitán, en representación de la entidad ecologista Asociación Pinya de Rosa.
El documento aprobado es un nuevo intento para que se descarte la prolongación de la autopista C-32, convertida en carretera con tramos desdoblados en el sentido de subida de pendiente, entre Blanes y Lloret.
Los partidos en la oposición y la entidades ecologistas se oponen por el importante impacto ambiental que tendrá la obra y la afectación a parajes naturales.
En la moción se pide que la Generalitat aplique una moratoria al proyecto, para dar tiempo a que se celebren en Blanes y Lloret sendas consultas populares en las que los residentes se pronuncien sobre la conveniencia o no de ejecutar el proyecto. En la moción se pide que la consulta se realice en un plazo máximo de tres meses a partir de la aprobación del pleno.
Los colectivos que se oponen a la prolongación de la C-32 argumentan que los estudios de movilidad realizados concluyen que la mayoría del tráfico que se registra entre Blanes y Lloret por la carretera Gi-682 son desplazamientos «internos» entre ambas ciudades y que solo una «puntualmente una minoría» de tráficos son a ajenos a ambas poblaciones. Estos desplazamientos se concentran los fines de semana y el mes de agosto. Por tanto, argumentan que la infraestructura proyectada tendrá una escasa utilidad.
Objetivo: la rotonda de Ca la Guidó
La segunda moción está relacionada con el sempiterno asunto de la construcción de la rotonda de Ca la Guidó, para lo cual se considera conveniente que el tramo urbano de la Gi-600 pase a ser de titularidad municipal, pues ahora depende del Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat. Cuando el vial pase a depender del Ayuntamiento, será más fácil construir la rotonda.
La moción la presentaron los grupos municipales de ICV-EUiA, Ciutadans (C’s) y Batega per Blanes, se aprobó por unanimidad. En la moción se pide que la petición de cambio de titularidad se tramite «con la máxima urgencia».
El concejal Joan Salmerón, que defendió la moción, recordó que en 2010 el Ayuntamiento elaboró un proyecto de la rotonda. Ayer, pidió que se recupere el mismo a fin de construirla la rotonda lo antes posible, pues es una demanda ampliamente solicitada por los vecinos del barrio de Ca la Guidó.