A pesar de la mejora registrada en varios indicadores macroeconómicos y relativos al sector turístico en los últimos meses de 2010, los empresarios hoteleros se muestran prudentes en sus previsiones para el primer cuatrimestre de 2011 y estiman que todavía es prematuro hablar de una recuperación del sector, según contempla el Observatorio de la Industria Hotelera Española (OHE), presentado por la Confederación Española de Hoteles (CEHAT) y PwC.
El indicador OHE Hotelero, que recoge las perspectivas de los empresarios hoteleros asociados a CEHAT, representante de 64 asociaciones y 1.500.00 plazas, desciende en 4 puntos en relación al primer cuatrimestre de 2010. Esto puede deberse al alargamiento de las dificultades económicas desde el inicio de la crisis en 2008, y al comportamiento de variables que seguirán incidiendo negativamente en la rentabilidad.
Este primer estudio del año 2011, muestra una cierta confianza del sector en relación a la evolución de las pernoctaciones, que se traduce en un crecimiento de más de cuatro puntos respecto al mismo periodo del año anterior y a una subida de más de treinta puntos en relación al primer cuatrimestre del año 2009, cuando la crisis comenzó a afectar de forma directa al sector hotelero y turístico.
En relación a los mercados de origen, el 74% de los empresarios hoteleros estima que el turismo nacional se mantendrá, el 58% opina que también se mantendrá el turismo extranjero y un 23% prevé, incluso, que puedan crecer las pernoctaciones de los principales mercados internacionales.
En este sentido el OHE Hotelero, elaborado conjuntamente por CEHAT y PwC, refleja expectativas positivas por parte de los hoteleros españoles acerca de las llegadas de turistas alemanes (65,5 puntos), franceses (63,5 puntos) y procedentes de los países nórdicos (61,1 puntos).
No obstante, y a pesar de una percepción de crecimiento en las pernoctaciones, el sector hotelero cree que se reducirá la estancia media. En este apartado el índice se sitúa en 35,2 puntos, diez menos que el año anterior. La mayor parte de los consultados opina que las estancias inferiores a siete días se mantendrán, pero será complicado mantener las estancias superiores a siete días y sobre todo, a quince días.
Asimismo, y en relación al precio, el índice sigue en posiciones pesimistas y se sitúa en 39,3 puntos. El 47% cree que el precio será similar al mismo periodo del 2010, después de dos años de ajustes y el 37% estima que incluso podría experimentar un nuevo decrecimiento. Solo un 16% de los hoteleros prevé que se pueda recuperar.
Los empresarios del sector español mantienen su escepticismo ante la recuperación de la rentabilidad. Este índice cae a los 28,1 puntos, desde los 35,6 puntos registrados en el mismo período de 2010. El 49% cree que la rentabilidad decrecerá durante estos primeros meses del año, frente a sólo un 5% que sostiene que mejorará.
El sector subraya la importancia de la promoción para la recuperación de su actividad, aunque el Observatorio registra una reducción de las perspectivas de los hoteleros en referencia al esfuerzo promocional y publicitario, con valores de 30,1 puntos y 38,4 puntos, respectivamente, 18 y 7 puntos por debajo de las expectativas registradas en el mismo periodo del año anterior.
Mejoran las perspectivas macroeconómicas
Asimismo, el índice OHE Macroeconómico del Observatorio de la Industria Hotelera Española, en el que están incluidas las expectativas de un pool de más de 300 expertos pertenecientes a empresas, universidades y centros de investigación, asociaciones empresariales y profesionales y otras instituciones, manifiesta mejores perspectivas respecto a la evolución económica del país, con un incremento del 19% con respecto al primer cuatrimestre de 2010, debido principalmente a las expectativas de recuperación del PIB y de reducción de la tasa de desempleo en España en el corto/medio plazo.
Los expertos consultados no esperan, según refleja el OHE Macroeconómico, grandes cambios en la situación coyuntural económica de España a corto plazo, aunque se aprecia un mayor peso en las expectativas positivas frente a las negativas. Las previsiones sobre el consumo de las familias se mantienen estables, con la opinión de más de la mitad de los expertos de que se mantendrá en los mismos niveles de los últimos meses.