El temor expresado por Salvador Balliu, alcalde de Caldes de Malavella, en el sentido de que las obras de desdoblamiento de la N-II habían creado una zona de peligro en el desvío para acceder a la población, se materializaron ayer.
Porque en el citado cruce ocurrió ayer tarde un accidente en el cual se vieron involucradas seis personas pero que, afortunadamente, no revistió de gravedad. Un Mercedes y un Ford Focus chocaron al kilómetro 700,8 y todos los ocupantes de los coches resultaron heridos leves. Precisamente el pasado martes Blanesaldía.com comentó la preocupación de Balliu.