La movilización que realizaron ayer los padres de los alumnos del colegio Sa Forcanera de Blanes y sus hijos, para reclamar que se construya un nuevo centro escolar, dieron un primer resultado positivo, al anunciar el Departamento de Educación que a la mayor brevedad se licitará la redacción del proyecto arquitectónico.
A primeras horas de la mañana entre 150 y 200 padres se concentraron en las inmediaciones del colegio, mientras que muchos niños se presentaron con cascos, para evidenciar la precariedad del centro, cuyas aulas se encuentran en módulos prefabricados. Tambien, otros escolares llevaban globos en los que podía leerse que quieren un nuevo colegio.
Los padres hicieron una cadena humana entorno a la escuela. La protesta contó con la presencia del alcalde, Josep Trias, la concejala de Educación, Pilar Planella, y de ediles de CiU, PP, PSC y EUiA y el exconcejal de ERC Joan Puig.
Según un comunicado de la AMPA, el centro escolar y el Ayuntamiento recibieron horas después un documento del Departamento de Educación el que se comunicaba que «se ha encargado al director de la División de Edificación de [la empresa pública] GISA el proyecto de nueva construcción de la escuela» y que «por necesidades de escolarización el proyecto se redacte con la máxima rapidez posible».
En el comunicado del AMPA, se indica que «durante la primera semana de diciembre se deberá publicar en la web de GISA la licitación para la redacción del proyecto», asunto del que se tendrá informado a los padres, así como de las siguientes fases del proceso. Por este motivo, la AMPA creará «una comisión de seguimiento que comprobará que se vayan cumpliendo los plazos previstos». Y, si éstos se demoran, volverían a programarse movilizaciones de protesta.
Cautela del alcalde
Porque el anuncio de que la Generalitat licitará la elaboración del proyecto ha comportado que el AMPA desconvoque «provisionalmente» las movilizaciones que había programado. La más importante consistía en acudir los padres y los escolares del centro la mañana del lunes 22 a la plaza de Sant Jaume de Barcelona, para protestar ante la institución. Una manifestación de tal calibre habría distorsionado la campaña electoral a pocos días de la elecciones y habría conseguido un impacto mediático que la Generalitat no se podía permitir. Por este motivo, habrá que ver si el avance logrado es real o sólo pretende desactivar la protesta en Barcelona.
El alcalde Josep Trias se mostró ayer cauto al valorar la noticia de la redacción del proyecto. Trias declaró a «Diari de Girona» que «por ahora, esto sólo es una salida por el momento en el que nos encontramos. Un proyecto se puede quedar mucho tiempo en el cajón». Y exigió a Educación que, para dar credibilidad al proyecto arquitectónico, la Generalitat debe acompañarlo de «una partida de seis millones de euros», que son los que se necesitan para un centro que cuenta con 440 alumnos.
Una justa reivindicación
El colegio de educación infantil y primaria (CEIP) Sa Forcanera se creó en 2005 al reunir en un mismo espacio una sucesión de módulos prefabricados, además de disponer de un patio de reducidas dimensiones. Por el volumen de alumnos que acoge y las carencias del centro, estaba situado en primera línea para que este mes el Consell de Govern de la Generalitat aprobase su construcción. Previamente, el Ayuntamiento se ha gastado 600.000 euros en aplanar el solar, pues se ha debido realizar una importante retirada de tierras en una superficie de 10.500 metros cuadrados.
Sin embargo, en la reunión de pasado día 9 la Generalitat dio luz verde a la construcción de dos colegios en la demarcación de Girona, uno en Roses y otro en Salt, cuando la AMPA y el Ayuntamiento habían recibido a lo largo del año la promesa de que, si se decidía que Girona tuviese dos nuevos colegios, uno de ellos sería el Sa Forcanera.
Texto y edición: José Fernández – Fotos: AMPA Sa Forcanera