Durante el 2012 se recogieron en la comarca de la Selva un total de 109.037 toneladas de residuos, de los que 34.053 correspondieron a recogida selectiva bruta. Esta segunda cifra es un 3,79% menos que en 2011 a pesar de que población, 173.518 habitantes, creció un 0,72%, según se indica en la estadística divulgada ayer por Agencia Catalana de Residuos.
De las poco más de 34.000 toneladas, 12.458 (36,58%) correspondieron a residuos biodegradables. De estos, 9.377,55 toneladas correspondieron a la fracción orgánica, mientras que el resto se debió a restos de poda de arbolado y autocompostage.
La recogida de papel y cartón en la comarca ascendió el año pasado 6.079 toneladas; otras 4.953 correspondieron a vidrio y 2.870 a envases. Los objetos de madera supusieron 3.082 toneladas; la chatarra alcanzó las 307 toneladas; los aceites vegetales las 20,56 toneladas y 60 de material textil. Merece destacarse que los escombros de obras totalizaron las 3.772 toneladas.
Las poco más de 109.000 toneladas de residuos suponen que cada habitantes de la Selva generó por término medio 1,72 kilos cada día (la media en Catalunya fue de 1,35 Kg/hab/dia), lo cual equivale a poco más de 628 kilos por habitante y año, un 6,21% menos que en 2011.
Merece destacarse que del total de residuos, el 31,23% correspondió a recogida selectiva bruta, cuando en el conjunto de Catalunya el porcentaje medio se situó en el 39%. El dato indica que en la comarca hay margen para mejorar la recogida selectiva.
11,57 toneladas de medicamentos
La estadística de la Agencia Catalana de Residuos también aporta datos sobre otros materiales recogidos, que totalizan 156,64 toneladas. Este apartado se desglosa en los siguientes conceptos: 89,68 toneladas de residuos valorizables; 6,72 toneladas de baterías, 5,92 de fibrocemento, 11,57 de medicamentos; 12,54 de aceites minerales; 9,45 de pilas y 20,76 de neumáticos.
La Agencia Catalana de Residuos indica en un comunicado de prensa que en el conjunto de Catalunya «la recogida selectiva ha disminuido en general respeto en 2011 en 1,6 puntos. Las fracciones que presentan un mayor descenso son el textil, la chatarra y el papel y cartón. El esfuerzo de la ciudadanía ha sido importante en la separación de los residuos, pero hay que tener en cuenta que se han producido otros factores, asociados al contexto económico actual, como la disminución del consumo y los hurtos de materiales valiosos que se producen, sobre todo, en contenedores de las grandes ciudades, y también en los centros de recogida».