La manifestación ha comenzado a las 11 horas y ha finalizado a las 13,15. Al inicio de la marcha eran menos de mil los manifestantes. Sin embargo, a partir de la entrada en el caso urbano de la población por la Avinguda Joan Carles I se han ido añadiendo personas, en especial al pasar por la Rambla Joaquim Ruyra, donde según Protección Civil podrían haberse congregado en esa zona unas 2.000 personas.
La marcha la abría el comité de empresa del Hospital de Blanes y el personal del centro sanitario, además de empleados de Hospital de Calella y de los centros de asistencia primaria que dependen de la Corporación. Detrás, se mantuvo un espacio de separación de unos 20 metros seguido por otra pancarta de la plataforma de entidades locales que se oponen a los recortes de la sanidad, tras la que se agrupaban el resto de asistentes a la protesta.El tramo entre el hospital y la entrada a Blanes se cubrió en pocos minutos, pero después la manifestación discurrió a un ritmo excesivamente lento, pues se llegaron a hacer varias paradas y se andaba despacio. Durante el recorrido por el casco urbano de la población, varios cientos de personas presenciaron la marcha, tanto desde la calle como desde los balcones de las viviendas. Al pasar por la plaça de la Solidaritat y el inicio de la Rambla Joaquim Ruyra, un centenar de personas aguardaban la llegada de la manifestación.
Cuando desembocó en el Passeig de Mar, Albert Salas, portavoz de la plataforma de entidades vecinales que se oponen a los recortes de la sanidad, leyó un texto en el que enumeró los principales recortes que se avecinan: de tres a una ambulancia en Blanes; cierre del servicio de urgencia de los ambulatorios; los partos se harán en Calella y, previsiblemente, se producrá un alargamiento de los plazos para la realización de análisis y pruebas como radiografías y TACs.Salas afirmó que estos recortes comportarán “una más que segura merma de la calidad de la sanidad. No aceptamos que se desmonte la sanidad pública para ponerla en manos de las mutuas privadas”. Y recordó que el conceller de Sanitat era antes de ocupar el cargo “el presidente de la patronal de las mutuas”.
No habrá despidos
Por su parte, José García, presiente del comité de empresa del Hospital de Blanes, dijo que la manifestación había sido un “éxito rotundo” y agradeció el apoyo que habían recibido de la población. Preguntado por la evolución que han experimentado las negociaciones , explicó que ayer se celebró una reunión en la que se produjeron algunos avances.
El próximo martes los representantes de los trabajadores y de la Corporación volverán a reunirse. La previsión es que de este encuentro salga un texto en el que se plasme un principio de acuerdo, que el miércoles se comunicará a los trabajadores para que se someta a debate y votación.
García comentó que la empresa ha aceptado que no se produzcan despidos –inicialmente el ERE contempla 95 despidos durante este año-. Al parecer, tampoco habrá recortes de la jornada de trabajo y sólo se producirá una disminución de los “derechos laborales” de la plantilla, según afirmó García.Si los acuerdos que empiezan a esbozarse fructifican, la plantilla apenas se verá afectada. Es lo que ha sucedido en los hospitales de Sabadell y Terrassa, donde los trabajadores han aceptado rebajas de derechos a cambio de que se mantenga la totalidad del personal.
Posible manifestación en septiembre
El otro capítulo de la protesta, los recortes de los servicios sanitarios, se mantendrán. Por este motivo, Albert Salas, insistió en que “no podemos bajar la guardia” ya que empieza a hablarse de nuevos recortes sociales, como una disminución de las subvenciones a los padres que llevan sus hijos a las guarderías.
En la manifestación se comentó que se empieza a trabajar en la organización de una gran manifestación en Barcelona, que podría llevarse a cabo a principios del próximo mes de septiembre y que estaría organizada por las distintas plataformas ciudadanas que se han creado en diversas poblaciones para oponerse a los recortes en la sanidad.
Texto, fotos y edición: José Fernández